No le dediques todo tu tiempo
Evita tener tu tiempo completamente disponible para una sola persona. Aún cuando no tengas planes concretos, no le digas “no tengo nada”… mejor dile tú cuándo tienes disponibilidad, y listo. La frecuencia de los encuentros con tu fuck buddie no debe ser la misma de una relación formal. Si se ven una vez en semana, bien, y si se ven una vez al mes, bien también. Si decides que quieres verlo con mayor frecuencia, uno de los dos puede desarrollar sentimientos.
No dejes de salir con otras personas porque esta te gusta más
Si el arreglo es mantener las opciones abiertas, no decidas una exclusividad porque esto probablemente hará que prefieras compartir todo tu tiempo con esa persona y es posible que te enchules sin querer.
Deja el afecto para cuando estén en la cama, no si salen en público
Tampoco generes demasiado contacto visual mirándolo como si estuvieses enamorada o el fuese la 8va maravilla. Menos, es más.
Tu rol es disfrutar contacto sexual por un espacio limitado y ya
No le cocines, no te pongas a ver Netflix o te quedes conversando en la cama demasiado tiempo. No te quedes a dormir en su casa ni tu fuck buddie en la tuya.
No enseñes que hay algo entre ustedes en las redes sociales
Tagguear en temas sexuales o de relaciones, subir fotos juntos para darle un lugar protagónico, podría provocar incomodidad en tu fuck buddie o en ti, además que tus seguidores pensarán que están en una relación de pareja.
Comunícate asertivamente
Si desde el principio expresas tus expectativas y actúas de manera cónsona a lo que acordaron, habrá menos espacio para que alguno malinterprete el arreglo casual. Si por el contrario, encuentras que el acuerdo ya no te funciona, porque el sexo dejó de ser satisfactorio o porque comienzas a tener sentimientos, debes comunicárselo a tu fuck buddie.
Cuando se ha definido una relación casual, la misma no va dirigida a convertirse en algo formal. En ocasiones, hay personas que acceden a este tipo de relación “mientras tanto”, pero tan pronto conocen a alguien más, desaparecen sin previo aviso.
Es esencial que ambos estén conscientes de todo lo que puede suceder, y que se preparen para cortar sin resentimientos y sin mirar hacia atrás. Recuerda que este tipo de arreglo no busca “trabajar” o “mejorar” la relación porque solo lo iniciaron para conectar sexualmente. No confundas una cosa con la otra. Sé inteligente: continúa abriéndote a oportunidades y deja los sentimientos a un lado, porque si la estás pasando bien ¿por qué querrías complicarte la vida?
